Embarazo adolescente en México.
Fenómeno que supera las políticas de prevención.
El alto índice de embarazos adolescentes
en el país se ha convertido en un problema de comportamientos generacionales
aceptados y que repercuten en la calidad de vida, directamente con la situación
educativa, económica y cultural.
Actualmente México encabeza la
lista de países de la OCDE en embarazo
adolescente provocando preocupación por el futuro de estas nuevas
generaciones y con los jóvenes que ya
viven en la situación. El Gobierno de la República preparó en el año 2015 la Estrategia
Nacional para la Prevención de Embarazo en Adolescentes (ENAPEA) buscando
reaccionar ante el fenómeno con una campaña llamada “Es tu vida, es tu futuro, hazlo seguro”
la cual empodera a los jóvenes para poder tomar la decisión de empezar su vida
sexual responsablemente. Aunque son varias las hipótesis para la solución de
problema que va desde las aulas, la casa y los medios de comunicación, lo
cierto es que son varios los factores que propician y fecundan el fenómeno para
desembocar en una problemática de salud pública, sobrepoblación, contaminación
entre otros.
Uno de los puntos más importantes
en el tema es la situación económica en la que se ve envuelto el embarazo
adolescente, cabe mencionar que el embarazo temprano puede tener como
consecuencia el aumenta de la feminización de la pobreza, no sólo en términos
de ingreso, sino también en la salud y educación, pues generalmente dejan los
estudios y es más fácil conseguir un empleo con no muy buenas condiciones, lo
que imposibilita el desarrollo económico de la nueva familia.
De acuerdo con las estadísticas
proporcionadas por el Subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud,
Pablo Kuri Morales, en su mayoría son solteras y sin estudios o estudios
truncos y en muchos casos se repite con sus descendientes, el hijo de una madre
adolescente tiende a mayores posibilidades de llegar a ser padre adolescente ya
que los comportamientos generacionales son aceptados en estos sectores.
Mención y explicación de temas
Más allá de presentar cifras
alarmantes de la posición en la que se encuentra el país respecto a los
embarazos prematuros, debemos poner especial atención en los agentes que
contextualizan y germinan el problema.
Por un lado tenemos la sexualidad prematura, que
se ve reflejada en la gran cantidad de adolescentes que inician su vida sexual
a una temprana edad empezando desde los 12 años en determinadas regiones del
país como Chiapas, Estado de México, Guerrero, Veracruz y Puebla de acuerdo con
las gráficas del Instituto Nacional de Geografía y Estadística .
Una de las hipótesis planteadas
por diversos estudios académicos es que hay mayor contenido sexual en música,
televisión, redes sociales, publicidad alrededor de ellos la cual no es
proporcionada adecuadamente para orientar, sino que despierta en ellos una gran curiosidad que desemboca en relaciones
sexuales sin protección ni conocimiento de las consecuencias en la salud que
estas les puede traer como infecciones, embarazo no deseado o enfermedades de
transmisión sexual. Si bien es un hecho asumir que el inicio de la sexualidad a
temprana edad está latente en las nuevas generaciones entonces la información
para orientar debe estar presente y no casarnos con la idea de que al hablar de
sexualidad con los niños y jóvenes promueve el ejercicio de la sexualidad.
El aspecto socioeconómico que se relaciona
con la situación de pobreza y educación en los sectores con medios y bajos
recursos son los que mayoritariamente alimentan el fenómeno de los padres
adolescentes.
La Organización Save
de Children dio a conocer un
análisis en el cuál se expone que medio millón de adolescentes queda
embarazadas al año y el 60% son de familias de no suficientes recursos, incapaces
para hacerse cargo de la nueva responsabilidad, a partir del nacimiento se
desata un circulo donde la madre abandona los estudios o trabajo, los servicios
de salud son insuficientes para cuidar a las madres y a su producto, la familia
carece de recursos para absorber los gastos de un bebé y en casos más
preocupantes las madres llegan a sufrir complicaciones en el parto o embarazo
por ser muy jóvenes.
Principalmente en este sector se perpetúa
acentuadamente el problema debido a la falta de orientación y a la aceptación
del círculo vicioso.
“En la cultura
mexicana se santifica la maternidad y le otorga un estatus social, una vez que
las jóvenes se embarazan adquieren, no de manera consiente o predeterminada,
ése reconocimiento. Es una forma de realizarse ante la adversidad de sus
circunstancias y las del país, en las que las oportunidades de educación son
menores y el mercado laborar es altamente competitivo. A ello se agrega un
futuro de incertidumbre extrema. El gran número de pobres es una de las razones
del medio millón de embarazos adolescentes al año en nuestro país.”
La presión social, la violencia
en el noviazgo y el abuso sexual son también algunas preocupaciones que
participan en el aumento del fenómeno, cabe destacar que existe una
focalización de casos en esta división que se desarrolla en un contexto ajeno a
la decisión personal de iniciar una vida sexual y no generalizar el fenómeno
del embarazo adolescente, se estima que alrededor de 16mil son los casos
detectados en el país por violencia y/abuso sexual, informa la Organización
UNICEF en México.
Juicio sobre los hechos presentados
El primer diagnóstico que hay en
relación a los puntos presentados anteriormente, independientemente de la
complejidad del problema es la planeación de proyectos de vida y en el país a
pesar de las transformaciones radicales que se han dado especialmente con el
estatus de la mujer, en actividad económica, educación, laborar, para sectores
importantes de la población los proyectos de vida no se han transformado y en
esta sociedad el proyecto más importante
para mujer sigue siendo la maternidad. La mujer puede desarrollarse en
cualquier otro ámbito que no necesariamente tiene que ver con la maternidad y
esto es fundamental, las políticas de población ha sido incapaz de modificar la
estructura que permita que la mujer tenga proyectos de vida alternativos. En un
país como México la fiesta de XV años tiene una especial significación porque se
trata de presentar oficialmente el inicio de una mujer dejando atrás la faceta
infantil, la niña está lista para la reproducción y el matrimonio.
Es absolutamente injustificable
que las adolescentes de desde los 15 años se asuman con el rol de madres. Educación sexual
que tengan desde niños para prevenir el embarazo y fomentarles proyectos de
vida.
Tenemos una sociedad sociedad con
una moral que impide la función correcta de las políticas, hemos sido incapaces
de reconocer que la sexualidad no está ligada a la reproducción. Ligando
permanentemente sexualidad con reproducción, las investigaciones muestran que
los adolescentes conocen los anticonceptivos pero no garantiza su uso, no hay una
política pública que garantice el acceso a la anticoncepción.
La sexualidad no se ve de manera
íntegra, el contexto, hay otros elementos como los patrones culturales, las
relaciones humanas, autoestima, la vinculación sana.

Dr. Carlos Welti Chanes
Direcciones Web de consulta.